La cantante cubana Dianelys Alfonso Cartaya, mejor conocida en el panorama sonoro de la Isla como La Diosa, se unió al grupo de más de 300 artistas e intelectuales que se plantaron de forma pacífica el viernes frente al Ministerio de Cultura (Mincult), en apoyo al Movimiento San Isidro.
Durante el encuentro, la reguetonera exigió su derecho a trabajar y cantar en su país y denunció las trabas que le han impuesto las autoridades luego de su retorno de Estados Unidos.
“Yo le pido al señor Alpidio —ministro de Cultura—, por favor, que yo soy una cantante de este país y quiero cantar en este país”, indicó, ante el aplauso de los presentes. “Necesito que me dejes trabajar en mi país, a mí, y a todas las personas que están aquí”.
Asimismo, explicó la tristeza que representa para cualquier ciudadano regresar a su país natal y que le den la espalda.
“Me han convertido en una persona dura, en una persona polémica (…) han transformado mi ser, me han hecho mucho daño”, señaló refiriéndose a la actuación de los funcionarios del ministerio. “Es hoy. Tiene que hacerse el cambio ya, tienen que escucharnos ya, de una vez ya”.
Fernando Rojas se reune con los manifestantes
Además de Dianelys, otras importantes figuras, como el cineasta Fernando Pérez y el actor y realizador Jorge “El Pichi” Perugorría, acudieron a la manifestación en apoyo a los jóvenes.
“El Pichi y yo estamos aquí para decirle al ministerio de Cultura que los reciba” afirmó Pérez. “Eso va a ser el inicio de un nuevo lenguaje que nos hace falta a la cultura cubana (…) no habría que llegar a esto si hubieran escuchado desde mucho antes”.
Tras horas de horas de protestar pacíficamente, —y en un acto nunca visto— el viceministro de Cultura, Fernando Rojas, decidió dialogar con 30 representantes. No obstante, la manifestación contó con un importante despliegue de policías y agentes de la Seguridad del Estado. A la par, partícipes resultaron agredidos con spray de pimienta.
De acuerdo con reportes del portal 14ymedio, el encuentro entre Rojas y algunos de los manifestantes se extendió durante casi cinco horas, hasta poco antes de las 2:00 a.m. Poco después, voceros de la delegación enviada reaparecieron para dar a conocer los puntos acordados con el viceministro.
Reclamos de los manifestantes
Primeramente, las autoridades aceptaron interesarse por el caso del rapero Denis Solís, cuya arbitraria detención y subsiguiente condena desencadenó la huelga de hambre del Movimiento San Isidro, así como la situación del artista Luis Manuel Otero Alcántara, quien hasta ese momento llevaba diez días sin comer.
El Ministerio de Cultura también se comprometió en cesar el hostigamiento contra los artistas independientes y la Asociación Hermanos Saíz aceptó revisar el comunicado donde tildaban al MSI de “mercenarios al servicio de Estados Unidos’”.
Por último, se acordó que el próximo 2 de diciembre el ministro de Cultura, Alpidio Alonso, —quien no estuvo presente en el encuentro— se reunirá con los artistas independientes para escuchar la agenda de trabajo planteada por ese sector.
