La peculiar historia de una mujer de Rosario, Argentina, que mantenía relaciones fuera del matrimonio y para ello se reunía con su amante en la habitación de un motel, ha recorrido las redes sociales rápidamente.
Y es que la misma efectuaba el pago de la reservación a través de una extensión de la tarjeta de crédito de su padre, sin considerar la posibilidad de que, algún día, podría ser descubierta por él.
El caso es que un buen día el padre, decidió solicitarle al banco un resumen de los pagos de su tarjeta y cuál no sería su sorpresa al ver que existían cuentas de hotel pagadas por su hija.
Al ver esto, comenzó a lanzar algunas burlas, haciendo alusión a la cuenta de hotel, en presencia de su concubino, con el que mantenía una larga relación, poniendo al descubierto sus infidelidades.
El marido indignado, al enterarse de tal situación, inició una discusión con la mujer y sin pensarlo dos veces, decidió abandonarla.
Inmediatamente después de la ruptura, la mujer demandó por daños y perjuicios al motel y al banco emisor de la tarjeta por considerar que su privacidad había sido violada.
Desafortunadamente, para ella, el juez que examinó el caso, no encontró ningún motivo para pensar que la integridad de la mujer había sido quebrantada, por lo que rechazó la demanda.
El juez concluyó que el estado de cuenta solo notificó al titular de la tarjeta, a petición de él mismo, los detalles de las transacciones en las que fue usado su instrumento de crédito.
Vale aclarar, que la mujer y su marido, llevaban 11 años de relación de concubinato, tiempo en el cual un hijo fue concebido.
