La historia sobre como la abuela de Kate Middleton fue una espía
La duquesa de Cambridge, Kate Middleton, es admirada en Reino Unido y el resto del mundo. Reconocida como una mujer joven, culta, adinerada y casada con el heredero al trono de Gran Bretaña, es para muchos un modelo a seguir.
Pero un dato sobre ella, que no es tan conocido, es su peculiar historia familiar. Middleton es pariente de una notable espía británica, Valerie Glassborow, quien se convertiría en Valerie Middleton, abuela paterna de la duquesa.
Glassborow había sido reclutada por el Servicio de Inteligencia Británico, junto con su hermana gemela, Mary. Las hermanas fueron enviadas a las instalaciones secretas de Bletchley Park, ahora conocido porque fue la sede de los espías británicos durante la Segunda Guerra Mundial.
Madre de Peter Middleton, y abuela de Kate, Valerie cumplió su juramento de guardar el secreto sobre sus actividades y espionaje realizado en esa época.
“Juró guardar el secreto y nunca se sintió capaz de decirnos […] Cuando estaba viva, lamentablemente nunca pudo hablar de eso”, explicó la duquesa en una entrevista hecha por el Daily Mail.
Los nombres de las hermanas Glassborow, Valerie y Mary, están grabados en unas placas conmemorativas en el muro exterior de la antigua sede de espionaje. Junto a ellas, se encuentran los nombres de otros miembros importantes de la organización.
Las instalaciones militares de Bletchley Park, por mucho tiempo ocultas al mundo, están ubicadas en Buckighamshire.
Durante años, antes de contraer matrimonio, las hermanas acudían diariamente a la central, para continuar con su labor de espionaje. Encargadas de supervisar las conversaciones y mensajes que eran interceptados; dicho de otra manera, se dedicaban a escuchar las conversaciones secretas de los enemigos de estado.
La abuela y tía abuela de Kate, captaban y descifraban dichos mensajes. La sede en la que estaban situadas, fue de extrema importancia durante la guerra, al ser la encargada de descubrir los principales planes del ejército nazi, fue en Bletchley Park, donde el matemático, Alan Turing, descifró los códigos alemanes.
Bletchley Park, fue el epicentro del servicio secreto británico.
La abuela de la ahora, Duquesa de Cambridge, también fue testigo de uno de los momentos más importantes de la historia. Valerie junto a otras espías, estaban realizando un turno de guardia, cuando se interceptó un mensaje que anunciaba la rendición de Japón.
Valerie fue una de las primeras espías británicas en enterarse del final de la Segunda Guerra Mundial, aunque es probable que durante su carrera como parte del servicio de inteligencia estuviera llena de momentos similares, la abuela de Kate Middleton, tuvo que llevar esos secretos a la otra vida.
Pese a ello, su historia será una parte destacada de la biografía de la consorte del próximo rey de Inglaterra.