La “potencia médica” lo hace de nuevo: diagnosticaron mal al niño Damir
Varios análisis realizados en los Estados Unidos confirmaron que el diagnóstico dado por los médicos en la Isla estuvo errado desde el primer día
Un análisis médico realizado en el Hospital Pediátrico Nicklaus Children’s de Miami ha revelado que el niño cubano Damir Ortiz Ramírez, quien pasó por toda una odisea para recibir tratamiento fuera de Cuba, no padece el tipo de leucemia que le había sido diagnosticada en la Isla.
La revelación llega tras meses de bloqueo burocrático por parte del gobierno cubano, que dificultó el acceso a una atención médica adecuada para el menor, argumentando que la Isla contaba con todo para atender al menor, esto pese a la clara escasez de insumos en el país.
Damir, quien sufre de Neurofibromatosis plexiforme tipo 1 (NF1), una enfermedad genética que provoca el crecimiento de tumores, fue inicialmente diagnosticado en Cuba con Linfoma de Burkitt en febrero de este año. Sin embargo, los nuevos estudios realizados en Miami, bajo la supervisión de especialistas en Hematología, han descartado este diagnóstico, lo que pone de manifiesto los fallos en la atención brindada en la autodenominada “potencia médica”.
El diagnóstico erróneo de Linfoma de Burkitt, que en muchos casos puede ser fatal, fue puesto en duda desde el principio por el médico cubano y activista Lucio Enríquez Nodarse.
Enríquez, quien ha seguido de cerca el caso, señaló en redes sociales que los nuevos análisis mostraron la ausencia de células B maduras, un elemento crucial para confirmar el Linfoma de Burkitt. Este diagnóstico erróneo habría tenido implicaciones devastadoras para la salud de Damir si no hubiera recibido atención médica fuera de la Isla.
“Las esperanzas de supervivencia para el Linfoma de Burkitt son mucho menores que para otros tipos de leucemia”, expresó Enríquez, quien subrayó que el tratamiento debe ajustarse al tipo de enfermedad, lo que hace que los errores en el diagnóstico sean especialmente peligrosos.
El especialista también cuestionó cuántos otros pacientes cubanos podrían haber sido víctimas de diagnósticos erróneos debido a la falta de recursos y pruebas adecuadas en el sistema de salud cubano.
El Gremio Médico Cubano Libre también se sumó a las críticas, destacando la irresponsabilidad del diagnóstico realizado en la Isla. Miguel Ángel Ruano, presidente del gremio, puntualizó que en Cuba no se realizaron los marcadores inmunohistoquímicos necesarios para confirmar el Linfoma de Burkitt, lo que evidencia un grave error médico.
Además del diagnóstico equivocado, los especialistas en Miami encontraron bacterias en los pulmones de Damir, como Klebsiella y enterococo, que ahora están siendo tratadas de manera adecuada.
Eliannis Ramírez, madre de Damir, luchó incansablemente para que su hijo recibiera la atención médica que necesitaba, algo que no fue posible en Cuba. La madre alertó a otras familias cubanas sobre la falta de confianza en los análisis médicos realizados en los hospitales del país, instando a las madres a cuestionar los diagnósticos cuando no se les brinden pruebas suficientes.
