La reina Isabel II prepara demanda legal por difamación contra Harry y Meghan
La crisis y polémica que provocó la salida del Príncipe Harry y de su esposa, Meghan Markle, de la familia Real británica, parece no tener fin y continúan las tiranteces entre las partes implicadas –al parecer- la reina Isabel II prepara un contraataque legal, según reseña el diario británico The Daily Mail,
Durante meses y de diversas formas el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle se han dedicado a atacar a los Windsor con entrevistas muy bien pagadas en la televisión estadounidense.
Las fuentes citadas por la prensa local aseguran que la monarca, que cumplió 95 años en abril, está “exasperada” debido a las continuas declaraciones de los duques de Sussex.
Por ello ha pedido a los funcionarios de palacio contactar con abogados expertos en difamación.
Los ataques del matrimonio se intensificaron con el explosivo encuentro televisivo con Oprah Winfrey.
Ante las cámaras con millones de personas mirando la entrevista en EEUU, Harry, de 36 años, y su esposa, de 40, denunciaron que un miembro de la realeza había expresado preocupación por el color de piel de su hijo Archie antes de su nacimiento.
“La sensación, que viene desde arriba, es que ya es suficiente”, dijo un informante real al periódico británico The Sun.
“Hay un límite en la cantidad que se aceptará y la Reina y la familia real solo pueden ser presionadas hasta cierto punto”, continuó la fuente. “Están consiguiendo abogados. Harry y Meghan sabrán que no se tolerarán ataques repetidos”.
El equipo de la reina está considerando también enviar advertencias legales a Penguin Random House, que el próximo año publicará las memorias del príncipe Harry, coincidiendo además con las celebraciones en Reino Unido por el Jubileo de Platino de Su Majestad.
“Si alguien fue nombrado en el libro y acusado de algo directamente, eso podría ser una difamación” continuó la fuente en declaraciones a The Sun.
“Existe la preocupación de que el público estadounidense se esté enamorando de lo que dicen Harry y Meghan”, un asunto que la reina Isabel no está dispuesta a tolerar.