Liberan a varios de los balseros cubanos que llegaron a Florida en un bote robado
El bote desembarcó el pasado martes 17 de septiembre con varias familias y menores de edad a bordo, entre ellos un bebé de solo 10 meses
Las autoridades migratorias de los Estados Unidos liberaron a varios de los 43 balseros cubanos que arribaron esta semana a las costas de Florida, esto luego de haberse robado una embarcación pesquera de La Habana.
El medio de prensa Martí Noticias logró entrevistar a algunos de los afortunados, los cuales fueron liberados con grilletes electrónicos y formularios I-220A, los cuales les permiten permanecer temporalmente en EEUU.
El bote desembarcó el pasado martes 17 de septiembre en Cayo Marathon, con varias familias y menores de edad a bordo, entre ellos un bebé de solo 10 meses. La embarcación salió de Cojímar y llegó a Sombrero Beach.
El medio de prensa habló con la pareja que arribó con el bebé de 10 meses, la cual afirmó que decidieron arriesgarse debido a la grave crisis económica por la cual atraviesa la Isla, la cual ha hecho casi imposible conseguir hasta los artículos más esenciales.
“Amamos a Cuba, pero no hay oportunidades. Si protesto, voy preso”, dijo el padre de la bebé.
De igual manera, el cubano explicó que intentaron salir por Nicaragua primero, pero la cancelación de su vuelo los llevó a arriesgarse a bordo de una travesía marítima.
El abogado de migración Willy Allen explicó al citado medio que los balseros que llegan a Florida pueden ser procesados y liberados bajo ciertas condiciones, pero que la mayoría son deportados de regreso a la Mayor de las Antillas.
Pescador denuncia el robo de su bote
Días después de que se registrara la llegada de los 43 balseros a bordo de la embarcación pesquera “Zorro”, de La Habana, el dueño del navío, Fermín Puig, fue citado por la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) para ser interrogado.
Ahí, el hombre les explicó que el bote estaba amarrado en el puerto de Cojímar, pero que el lunes, cuando fue a verlo, se percató de que este había desaparecido, denunciando su robo. El pescador asegura que los oficiales insinuaron que este vendió su bote a los balseros, algo que niega rotundamente.
De acuerdo con Puig, esto no tiene sentido, pues ese bote era el único sustento que tenía su familia, por lo que no ganaba nada con venderlo y arriesgarse a ser detenido por las autoridades.
“Ayer salí casi a las 11 de la noche de la estación y hoy me citaron para la una de la tarde. Todo el tiempo insinúan que yo vendí el barco o facilité las cosas para que se lo llevaran. ¿Pero cómo voy a vender lo que le da de comer a mi familia?”, declaró tras su interrogatorio inicial.