Mario Cimarro y Danna García protagonizan reencuentro de Pasión de Gavilanes
A casi veinte años del último capítulo de la novela “Pasión de Gavilanes”, el melodrama colombiano sigue estando entre los preferidos del público latinoamericano. Incluso, la historia de los Reyes está siendo retransmitida hoy en día en su país de origen con gran éxito.
No es de sorprender entonces que el reencuentro virtual entre el cubano Mario Cimarro y Danna García, exprotagonistas de la novela, causará sensación entre la teleaudiencia.
Recientemente, los actores que dieron vida a Juan Reyes y Norma Elizondo llevaron a cabo una transmisión sorpresa y en vivo, a través de Instagram.
A lo largo de media hora intercambiaron risas, divertidas anécdotas y recordaron algunos momentos vividos durante el set de filmación en 2003. Uno de los secretos develados durante la conversación fue el temor de Danna a los caballos. Su pavor fue un problema a la hora de grabar las escenas de su personaje, ya que tenía que montar como un jinete profesional.
Sin embargo, explicó que fue gracias al actor cubano que pudo completar sus escenas. Mario —afirma— la hacía sentir segura y la ayudaba a calmar sus nervios, cuando ella temblaba de miedo.
“Siendo tú el mejor jinete de toda esa novela, que la gente no lo sabe y lo tiene que saber, Mario es un jinete impresionante. Yo tuve mucha suerte de que el par de escenas que me tuve que subir al caballo estaba Mario porque si no está Mario me muero”, confesó.
La historia de una estrella
Nacido en Cuba en 1971, Mario reunió todos sus ahorros y a principios de los 90 logró emigrar a México con vistas a convertirse en actor.
En la nación azteca, se integró a Televisa actuando en novelas como “Gente Bien”, dirigida por Francisco Franco, y “La Usurpadora”, que lo catapultó a la fama internacional. En 1998, protagonizó “La mujer de mi vida”, al lado de la actriz venezolana Natalia Streignard. Los dos se enamoraron y se casaron en 1999 pero terminaron divorciándose cinco años más tarde.
No obstante, su trabajo más aclamado llegaría con “Pasión de gavilanes”. En el dramatizado el cubano interpretó a Juan Reyes, un hombre fuerte y luchador, de 28 años, que se enamora de la bella Norma Elizondo. Una joven perteneciente a la familia, presuntamente, responsable por la muerte de su hermana Libia.
Después de atravesar la frontera y de abandonar su país donde no tuvieron suerte, los hermanos Reyes Guerrero consiguen instalarse en una pequeña y agitada ciudad, donde montan una panadería que los ayuda a mantenerse. Juan, el mayor de ellos es quien dirige el trabajo y se constituye en el jefe de aquel hogar.
Desde entonces, Cimarro —ahora de 50 años— ha formado parte de diferentes producciones en Colombia, Estados Unidos y Argentina. En 2019 viajó a Paraguay para integrar el plantel de jurados de la octava temporada del programa “Baila conmigo”.