Familiares de un joven de 18 años acudieron a redes sociales para denunciar que este se suicidó mientras cumplía con el Servicio Militar Obligatorio en la provincia de Mayabeque.
De acuerdo con el abuelo del joven, Julio César Correa Hernández, el suicidio ocurrió el pasado viernes 26 de mayo, en la Unidad 6244 de San José de las Lajas.
El fallecido fue identificado como Maikol Arcia Hernández, quien, de acuerdo con su abuelo, ya había amenazado con quitarse la vida.
“Quiero hacer esta denuncia a nivel mundial, mi nieto Maikol se quitó la vida en el horario comprendido de las 6:00 p.m., en el Servicio Militar obligatorio de este país. Quiero aclarar que mi nieto tenía problemas mentales, lo cual nunca se valoró. Hace tres meses me dijo que se iba a quitar la vida de un tiro. Hablé profundamente con él”.
Luego de esto, Correa Hernández habló con los militares a cargo de su nieto, advirtiéndoles sobre el riesgo existente de que este se quitara la vida, sin embargo, este fue ignorado.
“Al tercer día le hago saber al capitán Yordany esta preocupación mía como padre de familia, el cual me manifestó que eso eran malcriadeces”, dijo el abuelo del joven en una publicación que fue bloqueada poco después.
En publicaciones posteriores, Correa indicó que el rostro de su nieto tuvo que ser reconstruido, sugiriendo que la causa de la muerte fue un disparo en la cabeza, esto pese a que suplicó que no le dieran armas al joven.
“Le dije personalmente que no le entregara armas a mi nieto para evitar males mayores, pero el oficial no entendió y lo puso a hacer guardia en un silo donde se encuentran armamentos y municiones”.
Según la publicación, el joven falleció alrededor de las 6:00 p.m., pero fue hasta las 10:00 p.m. que su cuerpo fue levantado. Según Correa, su familia no pudo verlo hasta las 4:00 a.m. del día siguiente.
“Desde las 6:00 p.m. estaba el cuerpo de este inocente tirado como un perro hasta que hicieron el levantamiento del mismo a las 10:00 p.m. Fuimos a Medicina Legal en San José a las 10:15 p.m. y no nos dejaron ver su cuerpo hasta las 4:00 a.m. Ahora, yo me pregunto, ¿quién responde por esta situación?”, dijo Correa, quien afirmó que se encargaría de que esto no quedara impune.
El abuelo se queja de que las condiciones de su hijo, quien había sido operado un par de años atrás, no fueron tomadas en cuenta a la hora de reclutarlo forzosamente.
“Mi nieto fue operado hace dos años producto de un batazo con un bate de aluminio, el cual le fracturó la mandíbula en tres partes. Se le implantó una lámina de metal y con puntos de alambre, la cual nunca se podía retirar, era fija de por vida, y así lo aprobaron para el Servicio Militar”.
Por último, Correa se quejó de que las publicaciones relacionadas con el incidente habían sido bloqueadas, señalando que no iba a parar hasta que la verdad se supiera.
“Para todos los administradores, no me bloqueen más, por favor (…) Es un ser humano, por favor, no un perro. Ustedes me disculpan, no me callo, es mi dolor, es el dolor de mi familia, es el dolor de mis amigos, vecinos, en fin, de mi pueblo. Quiero justicia y estoy preparado para lo que venga, que sé que nada bueno viene, eso es al seguro. Y si me sucediera algo, tranquilos, ustedes lo sabrán”, indicó en uno de sus más recientes posts.
