La esposa del príncipe Harry, Meghan Markle, prefiere estar cerca de la gente, aunque esto represente romper con el protocolo real, algo que a la realeza parece no gustarle, pero, sin embargo, tienen que tolerar, además de que es algo que al duque de Sussex parece no importarle, por el contrario, él prefiere apoyar a su esposa en todo lo que haga.
Durante una entrevista que sostuvo con el periodista Bryony Gordon, la ex actriz, aseguró que su única preocupación es conseguir dar visibilidad a las iniciativas solidarias que apoya y que lo única que le importa es que la escuchen.
“Su objetivo no es gustarle a la gente. Me he dado cuenta de que ese es su objetivo: utilizar su plataforma para ayudar a otras personas menos afortunadas que ella”, escribió el comunicador durante su artículo publicado.
“Si he aprendido algo acerca de Meghan, es que ella es de las que actúa en lugar de limitarse a quejarse. Ella se centra en las soluciones, no en el problema”.
La esposa del príncipe Enrique afirmó que el “saltarse” el protocolo repartiendo abrazos, por ejemplo, o pidiendo que nadie le haga reverencia, responde a una cuestión puramente práctica, ya que ayuda a que la gente se tranquilice a su alrededor.
Entre las principales críticas que Meghan ha recibido es que, afrenta su papel institucional de la misma manera que gestionaba su carrera como actriz: prestándole demasiada atención a su imagen pública y a su popularidad.
Sin embargo, la opinión de los ingleses sobre ella, al parecer, es algo que no le interesa mucho, y más si cuenta con el total respaldo de su esposo, el príncipe.
A principios de la semana, la duquesa visitó una pastelería de Londres “The Luminary Bakery” que ofrece empleo y apoyo a un grupo de mujeres que están tratando de reconstruir sus vidas tras una experiencia traumática, donde afirmó que trata de estar siempre tranquila, “para que todo el mundo se relaje y se calme, porque al final del día todas somos mujeres. Cada una tenemos una historia que contar, y para mí es un honor poder escucharlas”, les dijo a las empleadas del lugar, incluso esta visita será incluida en el número de la revista “Vogue”.
