México compró 9 millones de dosis de Abdala para vacunar a menores de 11 años
El Gobierno de México adquirió nueve millones de dosis del candidato vacunal cubano Abdala, para “inmunizar” en contra del COVID-19 a niños de entre 5 y 11 años de edad.
Según indicó Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, el candidato vacunal se administrará en un esquema de tres dosis, por lo que el cargamento comprado por el país azteca alcanzará para 3 millones de niños.
“Tenemos ya el contrato con el Gobierno de Cuba y su compañía de biotecnología para la vacuna Abdala con nueve millones de dosis, y dado que es un esquema de tres de dosis serán suficientes para tres millones de niñas y niños”, declaró el funcionario durante una rueda de prensa.
Es necesario señalar que hay unos 15 millones de infantes censados en México, por lo que el resto de los menores serán vacunados con 7.998.000 dosis de la vacuna Pfizer, que serán utilizadas para 3.999.000 esquemas, una donación de 804.000 dosis enviada por Corea, que servirán para 402.000 esquemas, y 10 millones de dosis de otros medicamentos que arribarán a México a través del mecanismo Covax.
Es necesario señalar que el Gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador no reveló la cantidad de dinero utilizada para la compra del medicamento, ni mencionó en sus ruedas de prensa que las dosis que planea administrar a los menores de edad no ha recibido la aprobación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a más de un año de su desarrollo.
En ese sentido, el medicamento tampoco cuenta con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), en México, para uso pediátrico. Sin embargo, esto sorprende a pocos en el país azteca, pues durante la campaña de vacunación para los adultos, el Gobierno mexicano utilizó la rusa ‘Sputnik V’, que tampoco ha sido aprobada por la OMS.
La decisión de adquirir dosis del candidato vacunal cubano para inmunizar a los niños de México fue criticada por la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin).
El académico de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), el doctor Andreu Comas, afirmó que no existe evidencia pública de los estudios de la fase uno y dos del medicamento cubano en menores de edad, señalando que este es uno de los motivos por los cuales no ha sido aprobada por el máximo organismo de salud en el mundo.
“Igual es segura y es efectiva, pero sin la evidencia no podemos tomar decisiones”, dijo el académico.