Miami Beach: primer fin de semana del ‘Spring Break’ deja unos 140 detenidos
Esta ciudad fue la primera en anunciar estrictas medidas para prevenir incidentes durante la temporada vacacional
Las precauciones tomadas en el sur de la Florida ante la llegada de las vacaciones de primavera rindieron sus primeros frutos, con el arresto de más de 140 personas durante el primer fin de semana del llamado “Spring Break”.
Miami Beach, sede de las detenciones, fue la primera ciudad en anunciar estrictas medidas para prevenir incidentes durante la temporada vacacional, entre ellas un elevado precio de estacionamiento, de hasta 100 dólares.
La temporada de Spring Break siempre ha representado un riesgo para la seguridad general en la ciudad, con decenas de incidentes relacionados con el excesivo consumo de alcohol y la presencia de drogas ilegales entre los vacacionistas.
Desde faltas a la moral y delitos menores, hasta tiroteos y peleas con armas de distintos tipos, están entre los eventos que las autoridades trataron de evitar a toda costa en medio de la llegada de miles de turistas, principalmente jóvenes.
Junto con el cierre de calles y el levantamiento de vallas, se aprecia una gran presencia policial a través de patrullajes de a pie, bicicletas, vehículos todoterreno e incluso en unidades encubiertas, en un esfuerzo por mantener el orden y la seguridad en la zona, reportó Telemundo 51.
Las medidas comenzaron desde este viernes con la implementación de un punto de control policial, además de la presencia de bomberos y un puesto de atención médica en la intersección de la Calle 10 y Ocean Drive.
“El público verá alrededor de 18 agencias policiales locales, estatales y federales”, declaró Christopher Bess, portavoz de la policía de Miami Beach, quién recalcó el alcance de los esfuerzos de seguridad implementados en la región.
A pesar de los controles estrictos y las medidas de seguridad adicionales, algunos turistas se mantienen firmes en pasar unos días en la ciudad, con algunas personas que inclusive llegaron a caballo.
Mientras algunos turistas encontraron las medidas demasiado restrictivas, para algunos residentes, estas son necesarias en orden de mantener la tranquilidad.
Para otros, sin embargo, la situación ha significado una pérdida de la diversión habitual asociada con el Spring Break, especialmente debido a las restricciones en las licorerías y el aumento del tráfico vehicular.
El alcalde de Miami Beach, Steven Meiner, indicó que estas medidas tienen como objetivo limitar la cantidad de personas en la comunidad, destacando la importancia de priorizar la seguridad y la tranquilidad de los residentes y visitantes por igual.
Las autoridades locales y estales han promocionado las medidas a fin de que los visitantes se encuentren preparados para cumplir con horarios de toques de queda, revisión de bolsos ante cualquier sospecha, una reducción de horario para estar en las playas, instalación de alcoholímetros y arrestos por posesión de drogas o violencia.
La mayor parte de las actividades del Spring Break tienen lugar en un tramo de 10 cuadras de la calle Ocean Drive, reconocido por sus hoteles de estilo art déco, restaurantes y locales nocturnos, donde está la mayor vigilancia.