Muerte de bebés en Bayamo exhibe infección de bacterias en el hospital

El médico cubano Alexander Jesús Figueredo Izaguirre denunció la muerte de dos bebés recién nacidos en el Hospital Carlos Manuel de Céspedes, en la provincia de Bayamo.

De acuerdo con el médico, los bebés habrían fallecido a causa de una infección, producida a la vez por las condiciones inocuas del centro hospitalario.

A través de una publicación de Facebook, el médico denunció los hechos, afirmando que los dos bebés habían nacido sanos, pero contrajeron una bacteria en las instalaciones médicas, conocidas por sus malas condiciones y pésima higiene, lo que llevó a su deceso.

Figueredo indicó que, como es usual, las autoridades hospitalarias buscan encubrir los hechos, pues hablarían por sí solos en contra del régimen y la realidad de Cuba, que ante el mundo se promociona como “potencia médica”.

“La situación se está manejando en silencio y por debajo del telón para no sonar las alarmas de una posible contaminación bacterial en todo el hospital y haya que cerrar varias alas del mismo, para evitar más muertes por esta contaminación de una bacteria que ya se llevó la vida de dos recién nacidos”, detalló.

“Todo el consejo de dirección anda dando carreras para que la noticia no salga a flote (…) ¿Qué les dijeron a las madres de los fallecidos?”, añadió.

El médico, quien reside en Estados Unidos, afirmó que la noticia le llegó por diferentes vías, y prometió informar de la situación a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en cuanto tenga más información.

La publicación generó miles de reacciones y comentarios, incluyendo uno del director del hospital en cuestión, Adonis Frómeta Guerra, quien negó la acusación de Figueredo e incluso le exigió pedir disculpas en público.

Según Frómeta, sí es cierto que murieron dos bebés, pero no a causa de una infección, sino porque nacieron prematuros y con bajo peso.

“Dos fallecidos en diferentes fechas de recién nacidos con estadía prolongada en el servicio de neonatología, los cuales no tuvieron relación con infección. Desde el punto de vista técnico se trataba de recién nacidos menores de 1,500 gramos, prematuros y con diagnóstico de CIUR. Revisen la fuente de información”, comentó.

Ante esta respuesta, Figueredo no se quedó callado, y aseguró que sus fuentes son confiables, y que se trata de pacientes, médicos y enfermeros del hospital, que están “cansados” de tapar sus mentiras para proteger al sistema.

“No le digas más a los médicos que no se comuniquen conmigo porque más lo hacen (…) creo que los únicos que tienen que pedir disculpas son ustedes, el PCC y la seguridad del Estado”, afirmó.

El caso llega a unos días de que una madre denunciara la muerte de su bebé por una supuesta negligencia médica en el policlínico Tomás Romay, en La Habana Vieja.