Nuevas políticas de asilo podrían afectar a represores tratando de entrar a EEUU

Las autoridades de los Estados Unidos informaron sobre cambios significativos que serán aplicados a la política de asilo político que podrían afectar a los represores del régimen castrista, venezolano o nicaragüense que intenten ingresar al país norteamericano.

De acuerdo con el medio Radio Martí, estas medidas restringirán la entrada a EEUU a personas con antecedentes penales o que hayan participado en actividades represivas.

“Están dándole la discreción a los oficiales de asilo en la frontera de hacer una serie de preguntas que descalificarían a los inmigrantes si participaron en la persecución de otras personas, si han sido convictos o cometido delitos no políticos”, indicó Ángel Leal, abogado consultado por el citado medio de prensa.

“Además, tampoco podrán pedir asilo quienes hayan obtenido esta condición en un tercer país o se presuma que sea un peligro para Estados Unidos”, añadió el jurista.

Estas nuevas regulaciones permitirían a los funcionarios tomar la decisión de negar la entrada al país a migrantes desde el principio del proceso, un cambio grande respecto a las prácticas actuales donde la elegibilidad se determinaba en una etapa posterior.

Sin embargo, esto también podría terminar afectando negativamente a opositores cubanos, los cuales a menudo son encarcelados por delitos fabricados.

“Nos preocupa que las personas que hayan participado en marchas o manifestaciones, y que tengan condenas por delitos comunes, no puedan obtener asilo”, indicó el abogado.

El Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, indicó que estas nuevas disposiciones eran un paso más para garantizar la seguridad del público estadounidense” pues ayudaban identificando y eliminando más rápidamente a aquellas personas que presentan un riesgo y no tienen bases legales para permanecer en EEUU.

En teoría, las nuevas pautas deberían impedir la entrada al país a personas que hayan ordenado, asistido o participado en actividades represivas, ya sean miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba (FAR) o del Ministerio del Interior (Minint).

Sin embargo, se desconoce qué tan rigurosas serán las investigaciones para corroborar esta información, pues resulta difícil de creer que estas personas no recurran a mentir para evitar ser sancionadas.

Leal señala que, en caso de que el migrante mienta a la hora de su entrevista de miedo creíble, o esconda información sobre su participación dichas actividades, este podría terminar siendo denunciado por fraude, lo que resultaría en el retiro de sus beneficios migratorios.