Cuscó Tarradel, periodista del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), arrojó a inicios de semana nuevos detalles del feminicidio acontecido el pasado fin de semana en el distrito santiaguero de José Martí.
Según explicó el corresponsal, además de herir a Daneyis Reyes Mustelier y Dania Bagarotti —vecinas de Micro 9 y Mico 10, respectivamente—, el homicida le disparó a una tercera mujer, quien logró huir a tiempo y quedó con vida. Al igual que las víctimas mortales del hecho, era trabajadora de un círculo infantil del área y se dirigía a la Universidad de Oriente donde cursaba la Licenciatura en Educación Preescolar.
“Fue atendida en el Hospital Provincial ‘Saturnino Lora’ de Santiago de Cuba. Hoy sufre secuelas psicológicas”, agregó
Los vecinos del área despertaron el sábado con la noticia del asesinato de Daneyis y Dania, madres y educadoras de los Círculos Infantiles “Mis Primeros Días” y “La Bailarina Española”. De acuerdo con reportes del portal Diario de Cuba, y contrario a la información del Ministerio del Interior (MININT), las dos mujeres no eran madre e hija sino amigas.
Ambas se encontraban en parada de la guagua, cuando fueron sorprendidas por Andy Calderón Sardiñas, padre del hijo de cuatro años de Reyes Mustelier. Las mujeres recibieron dos tiros cada una: Daneyis murió en el lugar de los hechos y Dania falleció en el hospital.
Al momento de su muerte, las víctimas, que hubiesen culminado sus estudios en julio de 2020, tenían 27 años. Incluso, una había celebrado su cumpleaños el pasado 1 de noviembre.
No tuve el valor de ir a verla en la morgue
“No tuve el valor de ir a verla en la morgue”, declaró a Diario de Cuba el padre de Daneyis, Raúl Reyes. “Nadie esperaba esto, ella nunca me dijo que Andy la había amenazado. Si ella me lo hubiese dicho, hoy la realidad sería otra”.
Conforme al testimonio de Reyes, la relación entre su hija y Calderón se disolvió durante los primeros meses de la pandemia.
“Él vivía en casa de ella, pero su mala bebida hizo que la relación se acabase”, detalló. “Hace unos meses, Andy se llevó al niño para el reparto Nuevo Vista Alegre y su hermano armó un lío en presencia del niño, por lo que Daneyis tuvo que ir a buscarlo tarde en la noche. Ella determinó no entregárselo más porque, entre otras cosas, cada vez que Andy iba a buscarlo estaba borracho”.
“Andy vivía acechando a Daneyis, siempre la llamaba, pero ella no quería volver con él (…) Hace unos días armó un lío tremendo, estuvo detenido, pero Daneyis se negó a denunciarlo diciendo que era el padre de su hijo. Ahora me entero de que él continuó con las amenazas, pero ella nunca me lo dijo”.
Poco después de los asesinatos, elementos de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) detuvieron a Calderón en Indaya, un barrio cercano al Distrito José Martí. Por el momento, las autoridades desconocen cómo el asesino se hizo con el arma homicida, una pistola de calibre 45. No obstante, según confirmó Tarradel, el crimen fue premeditado.
“En horas de la tarde de este 8 de noviembre se les da el último adiós en el cementerio Santa Ifigenia”, agregó el periodista. “¡Qué descansen en paz estas jóvenes y hallen sus familias los caminos de la luz! ¡Justicia!”.
