Las autoridades de Hialeah, Florida, continúan a la búsqueda del sujeto que baleó a una dentista cubana en la entrada de su consultorio. Los investigadores se mantienen en el área recabando información y han solicitado la cooperación ciudadana para avanzar en el caso.
Carmen Ramírez, de 60 años, se encontraba en las afueras de su consultorio, el pasado martes, cuando fue baleada por un desconocido. Tras los disparos, la mujer quedó tendida en el piso hasta que fue rescatada por paramédicos, quienes la trasladada en helicóptero al hospital Jackson Memorial.
Según reportes de medios locales, Ramírez recibió varios impactos de bala, tuvo que ser operada y necesitó de una transfusión de sangre.
Los detectives han regresado a la escena del crimen, ubicada en la calle 41, del este de Hialeah, para encontrar más evidencias que les permita identificar al tirador. Por el momento, continúan revisando de forma pormenorizada las cámaras de vigilancia de todos los negocios de la zona. También se ha descartado que se trate de un robo o de un acto al azar.
“Yo no puedo decir nada de mi esposa (…) No sé como dentista, pero como esposa es magnífica”, comentó Pablo Sánchez, esposo de la víctima en una reciente entrevista a América Tevé.
Hasta ahora, la única descripción que se tiene de los asaltantes es que era afroamericano y huyó “armado con una pistola 9 mm, en un carro marca BMW, color negro”. A la par, se conoce que en el momento de los hechos portaba una gorra de color negro, jeans y un suéter gris.
“Sentimos los tiros y corrimos para atrás, cuando nos asomamos la vimos a ella tirada gritando ahí”, declaró una de las testigos del hecho. “No sé qué pudo haber pasado porque ella es una persona decente. Dios quiera que se salve porque ella es una persona decente y una madre de familia”.
Mientras tanto, Carmen Ramírez se mantiene en condición crítica y bajo observación de especialistas.
