La nueva cinta de la cubana Ana de Armas, Blonde, se ha destacado por la polarizada crítica con la que fue recibida desde su estreno, el pasado 28 de septiembre.
Mientras que durante su debut en el Festival de Cine de Venecia la cinta tuvo una ovación de 14 minutos, y la aprobación de los críticos, que la consideraron una fuerte contendiente a los Premios Óscar del próximo año, con la audiencia, el recibimiento no fue tan positivo.
La película fue rechazada fuertemente por el público, que repudió la representación gráfica de violencia sexual, la forma en que se abordó el tema del aborto, el retrato que se hizo del ícono hollywoodense Marilyn Monroe, e incluso la falta de exactitud histórica, pese a que no se trataba de una cinta biográfica.
Todo derivó en que la cinta fuera uno de los mayores fracasos económicos de la plataforma de streaming Netflix, cayendo a la mitad de su audiencia en su segunda semana, en comparación con la de estreno.
Entre toda la polémica, algo en lo que tanto la crítica, como los espectadores, han estado de acuerdo respecto a Blonde, es en el gran trabajo histriónico de Ana de Armas, y su impresionante parecido con la legendaria actriz.
Además de la clara labor de caracterización, en la que se involucró vestuario y maquillaje, los expertos han señalado la razón más poderosa por la que la actriz se parece tanto a la diva de Hollywood: su sonrisa.
Mientras que el cabello rubio platinado y el característico lunar de la diva hicieron su parte, expertos odontólogos afirmaron que la transformación de De Armas resultó tan auténtica debido a que tiene una estructura maxilar parecida a la de la actriz, y que la forma y tamaño de su boca la hicieron perfecta para el papel.
“Hay un gran mérito en el maquillaje, el registro de la voz y el nivel interpretativo de Ana de Armas, pero poco se habla de la importancia que tiene la boca, los labios y la sonrisa en una caracterización de película biográfica, más aún si hablamos de una de las sonrisas más atractivas y cautivadoras de la historia de Hollywood, como la de Marilyn Monroe”, declaró la Dra. Eugenia Cervantes, odontóloga especialista en Sonrisas de Hollywood.
La conocida como “sonrisa en reposo” es un rasgo físico que comparten Ana y Norma Jean Baker, es decir, la porción de sus dientes que quedan expuestos cuando tienen los labios en reposo, sin hablar o hacer una expresión en particular.
“Ya sabemos que la actriz llevó ortodoncia para alinear su sonrisa y carillas para perfeccionarla. Pero lo que pocos han notado es el parecido en la sonrisa de ambas con los labios en reposo, que es como Marilyn se muestra en muchas de sus icónicas fotos”, explica la Dra. Cervantes.
“Si miramos atentamente notamos que ambas tienen casi la misma exposición dentaria de los incisivos superior (dientes centrales), tanto Marilyn como Ana de armas muestran aproximadamente entre 4 y 5mm que es lo ideal cuando hablamos de una sonrisa notoria y bonita”, agregó.
Sobre ese rango de apertura, la doctora mencionó que es un atractivo físico que embellece a De Armas, incluso sin compararla con Marilyn, pues encaja en los cánones de belleza más establecidos, aunque menos comentados.
“En estética dental el parámetro de una sonrisa femenina bonita es que, con el labio superior en reposo, los dientes se vean entre 2 y 5mm. El tercio inferior es una zona que en muchos casos puede revelar el parecido con otras personas, como familiares e incluso hasta con estrellas de Hollywood. Por eso, no dudo que, además su talento vocal e interpretativo, la sonrisa haya sido un elemento clave para que Ana de Armas se quede con el papel”, afirmó la experta.
