Son muchas las personas que se han percatado de una peculiaridad en la manera de vestir de la duquesa de Sussex, Meghan Markle; y es que últimamente, no importando la ocasión, se le ha visto vestida siempre de negro.
Este hecho ha causado bastante curiosidad; y como a ciencia cierta no se puede saber el porqué de ello, tanto los cibernautas como los medios locales británicos se han dado a la tarea de dar respuesta a esta incógnita, poniendo sobre la mesa varias hipótesis.
Una de ellas es que, aunque la llegada al mundo de su pequeño Archie trajo consigo una alegría tremenda, la realidad es que también dejó algunos kilitos demás, los cuales pueden estar haciendo que los vestidos que lucía antes la duquesa no la hagan ver tan esbelta como de costumbre.
Razón por cuál muchos especulan que el negro sea una manera de disimular un poco este hecho, mientras logra reponerse de este elemento que trajo consigo la maternidad.
Y aunque esto es lo que más se comenta, según Richard Fitzwilliams (un experto en la realeza británica) esta no es la verdadera razón.
Fitzwilliams asocia la vestimenta negra de la duquesa a un motivo de modestia en el entorno en el que se desenvuelve; explicando que esta es una manera de no opacar los eventos importantes en los que hace presencia.
En esta línea de ideas comenta que si asiste a dichas actividades de una forma más llamativa, existe el riesgo de que los eventos no causen tanto impacto como el que se espera; ya que serían muchos lo que, en vez de reportar el suceso al que se asiste y lo que en él pasa, se enfocarían en su presencia o la manera en la que vistió durante la actividad en la que se encuentra.
“El vestido puede convertirse en la noticia, pero vestirse de negro hace dos cosas, permite que la causa que ella apoya y las personas con las que se reúne sean más prominentes (…) El negro es un color seguro (…) tiende a significar que se da más publicidad a la causa y al pueblo”; declaró Fitzwilliams al respecto.
