Productos caros e inútiles: tiendas en MLC cierran 2024 con estanterías vacías
Mientras las tiendas no tienen productos esenciales, cuentan con artículos gourmet como aceite de trufa y caviar, todo a precios inaccesibles
La crisis de desabastecimiento que azota a Cuba desde hace meses se agrava conforme se acerca el fin del año. Ni siquiera las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), que se suponían una opción para sortear la escasez, logran mantener productos esenciales en sus estanterías. En su lugar, proliferan artículos de lujo con precios inalcanzables para la mayoría de los cubanos de a pie.
Según indicó el medio independiente Periódico Cubano, la situación genera frustración entre los ciudadanos, quienes denuncian la ausencia de productos básicos pese a haber reunido grandes sumas de dinero para cargar sus tarjetas en MLC.
Las imágenes de estanterías vacías contrastan con la exhibición de artículos como aceite de trufa a 20 dólares, quesos gourmet a 15 dólares el kilo y caviar enlatado por 80 dólares.
El monopolio estatal sobre el comercio exterior ha demostrado su incapacidad para mantener una oferta estable en estas tiendas. La Habana no es la excepción, y testimonios desde la capital confirman que la población solo encuentra productos exclusivos que no satisfacen sus necesidades diarias.
Desde su creación en 2019, las tiendas en MLC fueron justificadas como una estrategia temporal para captar divisas y mitigar la crisis. No obstante, su expansión ha acentuado las desigualdades, dejando a la mayoría de los ciudadanos, que reciben sus salarios en pesos cubanos (CUP), sin acceso a estos productos.
Esto deja en evidencia que la división entre quienes reciben remesas o tienen cuentas en divisas y aquellos que dependen exclusivamente de ingresos locales se ha profundizado.
La falta de planificación y la corrupción agravan el problema. Las decisiones de compra del Estado parecen desconectadas de las necesidades reales de la población, resultando en importaciones desmedidas de artículos gourmet que solo benefician a una minoría.
Por otra parte, las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes) privadas, que podrían ofrecer soluciones alternativas, enfrentan precios prohibitivos y restricciones gubernamentales.
Muchas se ven forzadas a cerrar debido a nuevas normativas que limitan su capacidad de operar. La Resolución 56/2024 del Ministerio de Comercio Interior (Mincin), publicada el 5 de diciembre en la Gaceta Oficial, revoca las licencias para el comercio mayorista de Mipymes, cooperativas no agropecuarias y trabajadores por cuenta propia.
Esta normativa obliga a las Mipymes y cooperativas a vender al por mayor solo a través de contratos con entidades estatales, prohibiendo la comercialización directa con otros actores privados.
Economistas como Pedro Monreal advierten que estas restricciones podrían intensificar la escasez de productos esenciales, disparar los precios y agravar la inestabilidad social. El control absoluto del comercio mayorista por parte del Estado amenaza con empeorar la situación y disminuir la eficiencia en el abastecimiento de bienes.
Mientras el discurso oficial defiende la existencia de las tiendas MLC como una vía indispensable para captar divisas, la realidad que enfrenta el pueblo cubano es otra.
El acceso limitado a productos esenciales es una muestra clara de las fallas estructurales del modelo económico castrista, el cual deja a la población sin soluciones tangibles en medio de una de las peores crisis económicas en la historia del país.
