Una monja polaca que responde al nombre de Filipa Bak busca devolver la esperanza a las mujeres embarazadas en situación vulnerable y evitar el aborto en Cuba.
Con el “Proyecto Esperanza” la religiosa quiere “ayudar a las mujeres que se han abortado a encontrar el perdón de Dios, que es rico en misericordia”.
La monja polaca aseguró que esta batalla la ha emprendido en un país en donde “se perdió el valor de la vida”. Así lo reseña la agencia católica de noticias ACI.
“El proyecto quiere llevar la esperanza a las mujeres que no tienen salida, que no ven la salida de estas situaciones difíciles”, dijo la religiosa.
Filipa es miembro de la Congregación de la Madre de Dios de la Misericordia.
En sus tres años de funcionamiento, el “Proyecto Esperanza” ha salvado más de 90 vidas, señaló la religiosa.
Bak asegura que llevar adelante este trabajo le permite “realizar mi vocación como religiosa, ser la madre espiritual”.
El proyecto insiste en que los bebés sean bautizados, “para convertirse en hijos de Dios”, dijo la monja polaca.
