Régimen de Cuba planea usar el reguetón como propaganda

El designado presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, admitió el fracaso del Decreto Ley 349, conocido como “Ley Mordaza”, y del elitismo con el que se ha tratado al género urbano en la Isla, anunciando su intención de sumarlo a la política cultural cubana.

Durante una intervención realizada el fin de semana en la clausura del X Congreso de Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), el también líder del Partido Comunista de Cuba (PCC) pidió a los intelectuales oficialistas del régimen no ignorar lo que sucede en el género urbano, y los instó a prestar atención “desde las instituciones a las nuevas expresiones culturales que surgen”.

“Todavía se dejan ver expresiones de menosprecio o subestimación desde posiciones a veces elitistas. Estamos ante un fenómeno cultural que trasciende los gustos sedimentados durante décadas por su fuerte componente y alcance social”, indicó Díaz-Canel, refiriéndose especialmente al reguetón, aunque sin mencionarlo directamente.

El designado presidente de Cuba expresó su deseo de que cambie la política cultural oficialista que se ha mantenido por años censurando y desdeñando a los géneros urbanos, especialmente al reguetón, por su “vulgaridad”, con letras inapropiadas que la gran mayoría de las veces aluden a situaciones sexuales, incluso a prácticas explícitas.

Aunque la música se incluyó desde 2019 en el Decreto 349, que establece que los músicos y artistas cubanos a profesionalizarse y vincularse con el Ministerio de Cultura, sometiéndose a las pautas culturales del régimen, el género urbano le huyó mucho tiempo a la legislación, y a la vez fue ignorada y desdeñada por el gobierno y sus representantes.

Sin embargo, tal parece que Díaz-Canel ya descubrió el potencial propagandístico del género urbano, reconociendo que se trata del género más escuchado en la Isla, y que se trata de un fenómeno cultural que puede ayudar al gobierno a acercarse a las masas.

“Desde esas expresiones culturales, que transitan principalmente desde la música, se están generando ideas, valores, concepciones de vida, señales de cambio de paradigmas culturales que no podemos ignorar ni desatender”, apuntó Díaz-Canel este sábado.

Manteniendo su discurso usual como víctima de Estados Unidos, Díaz-Canel acusó a los reguetoneros urbanos del exilio de componer letras contestatarias en su contra bajo la influencia del gobierno de ese país.

En ese sentido, dio a entender que Cuba podría tener pronto sus propios exponentes, que hablen a favor del régimen y difundan mensajes positivos a ese respecto.

“El hecho de que laboratorios subversivos radicados en Estados Unidos hayan apostado a exponentes de este género en épocas recientes para llegar a sectores populares es una señal no despreciable del impacto que tienen en segmentos cada vez más amplios del país y a los cuales nosotros también tenemos que saber llegar. Eso tiene que ver con cultura y Revolución”, concluyó.

Lo cierto es que el régimen le apostó mucho tiempo a una cultura de “buen gusto” y la predicación de recato y altos valores morales, sin embargo, esto no le ha atraído el éxito deseado, y los temas contestatarios de mayor éxito son urbanos, siendo el principal Patria y Vida, considerado el himno de la oposición.