El cantautor argentino Ricardo Montaner se comprometió públicamente a apadrinar al rapero cubano Maykel Osorbo, quien permanece encarcelado en Cuba desde 2021.
Osorbo es uno de los más célebres presos políticos de la Isla, por haber sido uno de los coautores del éxito opositor Patria y Vida, en febrero del año pasado.
En abril de ese mismo año, la Seguridad del Estado lo arrestó durante una manifestación por haber participado en una protesta pacífica, y luego de los eventos del 11J, se dispersaron los miembros del opositor Movimiento San Isidro (MSI), que reiteradamente pedían su liberación.
Por ello, el intérprete de La Cima del Cielo compartió un video en Twitter, en el que se sumó a la campaña ‘Apadrina a un preso político del mundo’, que encabeza el Instituto Casla.
La iniciativa pretende que famosos y personalidades reconocidas apoyen a las víctimas de regímenes autoritarios, visibilizando su causa y la situación de su país.
En el caso de Montaner, ya se ha pronunciado contra la dictadura cubana en otras ocasiones, y ahora decidió dar su respaldo público directamente al rapero contestatario.
“Es un muchacho joven que está en las cárceles de Cuba. Maykel Osorbo también es compositor, parte integral del grupo que escribió Patria y Vida… y está ahora mismo en las cárceles de Cuba pagando porque, según lo que le dijeron, él era un peligro para la sociedad”, indicó Montaner en el audiovisual.
Asimismo, aclaró que no solamente ofrece su compromiso para apadrinarlo “con la necesidad de pensar en el prójimo y en los demás, sino por la necesidad de que la gente sepa que mientras todo transcurre ‘tranquilo’ a nuestro alrededor, hay mucha gente pudriéndose en las cárceles injustamente”.
Al fin de su mensaje, el artista envió un abrazo a Maykel y reiteró su total apoyo para visibilizar el caso del miembro del Movimiento San Isidro (MSI), cuyos miembros fueron encarcelados o exiliados bajo los supuestos delitos de “desacato”, “atentado”, “desórdenes públicos” y “difamación de las instituciones y organizaciones, héroes y mártires”.
La salud de Osorbo, de 39 años, ha sido una de las principales preocupaciones de sus colegas y de los cubanos en general, pues se ha ido deteriorando y se teme que se trata de un fallo linfático.
Sin embargo, se ha negado a recibir tratamientos debido a que no confía en los médicos del régimen cubano, por lo que amigos y familiares intentado sin éxito tramitar su salida de la prisión para recibir tratamiento externo.
