Se confirma el primer feminicidio del 2025 en Cuba: ocurrió en Holguín
Las plataformas feministas independientes de la Isla indicaron que el delito pudo haberse evitado, pero que las autoridades no mostraron interés
A través de sus redes sociales, las organizaciones feministas independientes han confirmado el primer feminicidio registrado en Cuba en lo que va de 2025. El Observatorio de Género Alas Tensas (OGAT) y la plataforma Yo Sí Te Creo en Cuba (YSTCC) calificaron el asesinato de Elizabeth Ramírez Fernández como un acto de violencia de género que pudo haberse prevenido.
La víctima, una mujer de unos 30 años, fue asesinada en su residencia en Cacocum, provincia de Holguín, por su expareja Omar Torres Durán. Según reportes, este individuo había sido denunciado ante la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) a finales de diciembre de 2024 por agresiones previas, pero las autoridades no tomaron medidas para proteger a la víctima.
Ramírez residía junto a su hijo menor de edad y sus abuelos maternos, quienes dependían de ella tanto emocional como económicamente. En ese sentido, su muerte dejó a la familia en una situación de extrema vulnerabilidad.
De acuerdo con el perfil oficialista de Facebook Cazador-Cazado, el agresor se entregó a las autoridades pocas horas después del crimen. El informe detalla que Torres Durán, movido por despecho tras el fin de la relación, acudió a la vivienda de la joven con la intención inicial de “asustarla” y convencerla de retomar la relación.
Sin embargo, al ser rechazado, la atacó con un cuchillo cuando ella intentó huir de la vivienda en busca de ayuda. Las heridas resultaron mortales, y la víctima falleció desangrada.
El año pasado, OGAT y YSTCC registraron 55 feminicidios verificados en la Isla, una cifra alarmante que refleja la gravedad de la crisis de violencia de género en el país. En Cuba, el feminicidio no está tipificado como delito específico en el Código Penal, lo que deja a muchas mujeres en una posición de desprotección legal.
En un comunicado conjunto, OGAT y YSTCC denunciaron la falta de acción policial como una de las principales causas de esta tragedia.
“La muerte de Lisi pudo evitarse incluso con los limitados procedimientos actuales y sin enfoque de género de la PNR”, señalaron, exigiendo la implementación de mecanismos de protección efectivos para las mujeres en riesgo.
A pesar de los constantes llamados de activistas y colectivos feministas para promulgar leyes que castiguen la violencia de género, el gobierno cubano continúa postergando cualquier debate significativo sobre el tema.
La Asamblea Nacional ha pospuesto hasta 2028 una posible discusión, lo que, según los críticos, perpetúa la impunidad y el sufrimiento de las mujeres cubanas.
