Sismo de magnitud 6.1 en la escala Richter sacudió Santiago de Cuba
El movimiento telúrico fue sentido en todo el oriente, así como en las provincias de Camagüey y Ciego de Ávila
Un sismo de magnitud 6,1 en la escala Richter fue percibido en la provincia de Santiago de Cuba durante la madrugada de este lunes 23 de diciembre, generando inquietud entre los habitantes del oriente cubano.
De acuerdo con el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas (CENAIS), el temblor ocurrió a la 1:00 a.m., con epicentro ubicado en las coordenadas 19,77 grados de latitud norte y 76,61 grados de longitud oeste, a 9 kilómetros de profundidad y aproximadamente 35 kilómetros al suroeste de Chivirico, en la región santiaguera.
El movimiento telúrico fue sentido en todas las provincias orientales, así como en Camagüey y Ciego de Ávila, generando alarma en la población que dormía en ese momento.
Por Dr.Enrique Diego Arango Arias
Es un sismo independiente a los sismos del 10/11 de Pilón. Hasta las 5:00 am se han registrado 208 réplicas, algunas sentidas en las zonas cercanas al epicentro. No hay peligro de tsunami con sismos ocurridos en la falla Oriente, al sur de Cuba. pic.twitter.com/kSwhLAK6Ya— Centro Nacional Investigaciones Sismológicas🇨🇺 (@CenaisCuba) December 23, 2024
Según informó el medio Cubadebate, a las 4:00 a.m. el Dr. Enrique Diego Arango Arias, director del Servicio Sismológico Nacional, confirmó que el sismo provocó daños menores en viviendas que ya habían sido afectadas por movimientos anteriores en Providencia, Granma. También se reportaron deslizamientos de tierra en Guamaá, particularmente en la comunidad de Babujal.
Especialistas aclararon que este sismo no guarda relación con el registrado en Pilón durante noviembre, descartando que se trate de una réplica. La región oriental ha experimentado una serie de temblores significativos en las últimas semanas, y este evento marca el sismo número 137 perceptible en lo que va del año 2024.
Hasta las 5:00 a.m., se habían detectado más de 200 réplicas del temblor inicial, lo que mantiene en vilo a la población local ante la posibilidad de nuevos episodios sísmicos. Las autoridades continúan monitoreando la situación y recomiendan a los ciudadanos permanecer atentos.
Este fenómeno vuelve a poner de manifiesto la alta actividad sísmica en el oriente del país, subrayando la necesidad de reforzar las medidas de prevención y respuesta ante futuros movimientos telúricos.
Es importante recordar que, en los últimos meses, la actividad sísmica se ha incrementado en el oriente cubano, con dos sismos de magnitudes 6,0 y 6,7 sacudiendo esa región el 10 de noviembre.
Estos provocaron más de mil réplicas en los días siguientes, de los cuales al menos 47 de ellas fueron perceptibles. De igual manera, la situación dejó siete lesionados y más de 2.000 viviendas dañadas, principalmente en Granma, la provincia más afectada.
En ese territorio, 2.018 viviendas sufrieron daños, 26 de ellas experimentando derrumbes totales. A su vez, se reportaron nueve deslizamientos de tierra y afectaciones en 30 instituciones de salud y 40 escuelas, mientras que Santiago de Cuba registró daños en 234 viviendas.
