Trump busca eliminar la nacionalidad por nacimiento de hijos de migrantes
Mientras la ciudadanía por nacimiento es un derecho garantizado por la Enmienda 14 de la Constitución, el magnate busca modificar los requisitos
Durante su campaña electoral, el presidente electo Donald J. Trump prometió eliminar la ciudadanía automática para hijos de inmigrantes indocumentados que den a luz en suelo estadounidense.
El magnate argumentó que el derecho a la ciudadanía debía aplicarse únicamente a los hijos de ciudadanos o residentes legales, excluyendo a los hijos de indocumentados.
“Estados Unidos es uno de los únicos países del mundo que dice que incluso si ninguno de los padres es ciudadano o está legalmente en el país, sus futuros hijos son automáticamente ciudadanos en el momento en que los padres entran en nuestro suelo”, indicó durante sus actos políticos, denunciando que hay un “turismo de nacimiento” en EEUU.
Ahora, a poco más de una semana de su victoria, el equipo que el magnate ha estado reuniendo para su futura administración parece estar comprometida con llevar a cabo dicha promesa.
Uno de los elegidos para su gabinete fue Ken Cuccinelli, quien trabajó en el Departamento de Seguridad Nacional durante la primera administración Trump. Este calificó la propuesta del empresario como una “adecuada y viable desde el punto de vista político”.
Mientras la ciudadanía por derecho de nacimiento es un derecho garantizado por la Enmienda 14 de la Constitución desde hace mucho tiempo, la propuesta de Trump establecería que al menos uno de los padres tendría que ser ciudadano o residente legal para que un niño reciba la ciudadanía, una política que no se aplicaría retroactivamente.
Al respecto, expertos legales han cuestionado la viabilidad de dicha propuesta, pues un cambio de esta magnitud enfrentaría prolongados litigios legales y, en última instancia, requeriría una enmienda constitucional que necesitaría ser avalada por la Corte Suprema.
De igual manera, los especialistas consideran que, en términos prácticos, la implementación de esta política enfrentaría grandes desafíos burocráticos.
Y es que la Administración del Seguro Social y el Departamento de Estado necesitarían nuevos procedimientos para verificar el estatus migratorio de los padres de un niño que es registrado, pues, actualmente, no cuentan con mecanismos para comprobar esta información.
Pese a esto, el magnate parece estar convencido de poder llevar a cabo este cambio, así como de imponer otros cambios como reducir aún más la admisión de refugiados y limitar la “migración en cadena”, restringiendo los permisos de residencia para familiares de ciudadanos estadounidenses.