Venezuela redujo envío de petróleo a Cuba pese a aumento en su producción
Esto sugiere que Venezuela ha cambiado de estrategia, y ha preferido enviar crudo a clientes que pagan en efectivo
Las exportaciones de crudo desde Venezuela hacia Cuba se desplomaron en 2024, con un promedio de 32.000 barriles por día (bpd), una caída considerable respecto a los 56.000 bpd que se enviaron durante 2023.
Lo curioso es que esta disminución se registra al mismo tiempo que Petróleos de Venezuela (PDVSA) ha aumentado sus exportaciones, lo que deja en evidencia que uno de los aliados más viejos del régimen se está olvidando poco a poco de hacer negocios con la Isla.
Esta reducción en el suministro se produce en medio de un momento crítico para Cuba, donde persisten largos apagones, falta de gasolina en los servicentros y carencia de combustible para aviones. La economía cubana, que ya enfrenta serias dificultades, se ha visto forzada a operar con un marcado déficit de energía eléctrica.
De acuerdo con la agencia Reuters, la producción petrolera de Venezuela experimentó un incremento del 17% en 2024, alcanzando un promedio de 914.000 bpd durante los primeros once meses del año, esto de acuerdo con cifras de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Esta cifra supera los 780.000 bpd reportados en el mismo periodo de 2023. El recorte de envíos a La Habana no parece estar relacionado con una baja en la producción, ya que las exportaciones venezolanas aumentaron en un 10,5% a lo largo del año.
Estados Unidos recibió alrededor de 222.000 bpd de crudo venezolano, consolidándose como el segundo mercado más importante para Caracas, por detrás únicamente de China, que importó 351.000 bpd, a pesar de que esto representa una disminución del 18% en comparación con el año anterior. Las exportaciones hacia Europa casi se triplicaron, llegando a los 75.000 bpd.
El crecimiento en la producción petrolera de Venezuela ocurrió a pesar de una explosión e incendio en una de sus principales instalaciones de gas natural, el endurecimiento de sanciones estadounidenses desde junio y la detención de Pedro Tellechea, exministro de Petróleo, junto con otros exfuncionarios de PDVSA por presuntos actos de corrupción.
En noviembre, Jorge Piñón, director del Programa de Energía para Latinoamérica y el Caribe de la Universidad de Texas, afirmó al medio independiente Diario de Cuba que, por segundo mes consecutivo, Cuba estaba “al final de la ‘cola’ para recibir petróleo venezolano”.
Los datos finales del año confirman esta tendencia, evidenciando que el gobierno de Caracas prioriza su economía interna y alianzas estratégicas sobre los lazos políticos con el gobierno cubano.
El experto destacó que Venezuela “está optimizando sus exportaciones con socios que pagan en efectivo y/o brindan respaldo financiero y técnico al sector petrolero: China, India y las empresas Chevron y Repsol”.
Para compensar la disminución de envíos desde Venezuela, el gobierno cubano ha recurrido a otro aliado regional: México. Entre enero y septiembre de 2024, las exportaciones petroleras mexicanas hacia la Isla sumaron 500 millones de dólares, según un informe de la petrolera estatal PEMEX presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos.
Piñón indicó que no está claro cuáles son las condiciones de pago de La Habana por este crudo, aunque se presume que podría tratarse de un intercambio de combustible por los servicios de los médicos cubanos enviados a México. Además, resaltó que el petróleo suministrado a Cuba corresponde a la mejor calidad producida por PEMEX.
Esto último deja en evidencia que, mientras la dictadura se mantenga al poder con el obsoleto modelo comunista, la Isla dependerá siempre de la generosidad de otras naciones para tratar de satisfacer las necesidades del pueblo, algo que no ha logrado en años.