El boxeador profesional cubano Yordenis Ugás arremetió el pasado jueves contra Higinio Vélez, retirado deportista y actual presidente de la Federación Cubana de Béisbol (FCB), luego de que este indicara que el país recibiría con “brazos abiertos” a los peloteros cubanos de Grandes Ligas.
“Un comunista que odia a los exiliados e incluidos los atletas cubanos, sale y dice algo y salen todos los cubanos libres a saltar de alegría. Somos un pueblo sin memoria, sin vergüenza, ninguna”, manifestó el púgil.
“Si yo fuera un pelotero cubano de Grandes Ligas que, en su momento, me demonizaron y me llamaron traidor, apátrida y humillaron e hicieron sentir a mi familia que yo era un delincuente. Lo primero y mínimo que exigiría fuera una disculpa. A mí me hicieron todas esas cosas, pero por mi cabeza nunca pasaría regresar al equipo nacional. Es una lastima y es tan decepcionante ver la actitud de algunos de nuestros deportistas, que parece que el dinero y los éxitos no le han entregado vergüenza”.
¿Brazos abiertos?
Días atrás, durante una emisión del programa “La Jugada Perfecta”, Vélez explicó que las autoridades deportivas cubanas se encuentran estudiando la posibilidad de admitir en la selección nacional a aquellos jugadores que abandonaron el país y firmaron contratos con las Grandes Ligas de Estados Unidos (MLB, por sus siglas en inglés).
Incluso, puso como ejemplo al torpedero Erisbel Arruebarrena, quien jugó para los Dodgers de Los Ángeles y regresó este año a la Isla para la Serie Nacional.
“Todo es un proyecto, está en estudio y esperamos que tenga un final muy feliz”, manifestó. “Los brazos están abiertos, todos son cubanos”.
Durante décadas el Gobierno cubano vetó a los deportistas que “abandonaban” las filas nacionales. Los medios oficialistas omitían sus nombres y censuraron escenas de sus juegos más importantes. No obstante, siempre hubo peloteros que mostraron su anhelo de poder representar a la isla en eventos internacionales pero nunca tuvieron respuesta por parte de las autoridades.
